En la última edición del San Francisco World Spirits Competition, considerado “el Mundial de las bebidas espirituosas”, 119 Gin, elaborada en las destilerías Carmelitano de Benicàssim, se ha alzado con la medalla de plata por segunda vez en su historia tras conseguirlo en 2016. Alcanza el hito de ser la primera ginebra premium española capaz de repetir tan codiciado metal en este durísimo certamen al que se presentan casi 3.000 bebidas de todo el mundo.

Manuel Blasco con la 119 London Dry GinSan Francisco, 2019. Los 44 Jueces más reputados del mundo se citan durante 4 días para catar a ciegas miles de las mejores bebidas alcohólicas que se pueden encontrar en este planeta, llegadas desde 38 países distintos. La competencia es feroz. Se compite sin nombre, sin presupuesto de marketing. Sólo cuenta la calidad de tu producto, desnudo en pequeños vasos anónimos de muestra. Si acaso, por qué no decirlo, entran en juego los pequeños detalles nunca controlables de la alta competición. ¿Habrán dormido bien los jueces? Recemos porque nadie les tire un vaso y que el pescado de la cena en Pier 39 les sentara bien…
Todos los asistentes buscan alcanzar uno de los preciados metales de su categoría. Idílicamente, repetir o mejorar su resultado anterior para afianzarse y demostrar su calidad a nivel mundial.
“El mundo de las ginebras premium se parece al del boxeo. Llegar a tocar el cinturón es crucial pero no basta, lo que de verdad refrenda tu nivel es defenderlo en otro combate difícil”. nos cuenta Manuel Blasco, maestro destilador de la ginebra premium 119® London Dry, la primera española que consigue hacerse por segunda vez con una medalla de plata en el prestigioso certamen.

119 GIN LOGRA REVALIDAR LA PLATA EN EL MUNDIAL DE BEBIDAS

“Lo que valoramos del Mundial de San Francisco (SFWSC) es -aparte del enorme prestigio que aporta a nivel internacional- que es una pelea justa, sin ideas preconcebidas, mide sólo la calidad. Le da igual que seas un David o un Goliat en la jungla comercial.
Por eso tiene tanto mérito revalidar la plata. Aquí no recuerdan de otro año tu original botella, como en otros certámenes. No se pueden dejar impresionar por el prestigio de tu marca ni por tu precio o lo bien que te vendes. Aquí subes de nuevo al ring, a competir sin nombre y en igualdad de condiciones tanto con el más pequeño aspirante como con el máximo favorito. Aquí se ve quien es bueno de verdad.”
Sorprende que una pequeña destilería de Benicassim alejada de los focos como es Carmelitano, asociada casi siempre a productos más tradicionales como su Moscatel o licor –de más de 300 años de historia- esté siendo continuamente galardonada en la otra punta del mundo por el mayor escaparate mundial del sector, gracias a su ginebra y vodka Premium. “Puede chocar a la gente, sí, pero si conoces el sector Premium no es tan extraño. Si te fijas, ahí los principales éxitos internacionales de nuestro país están surgiendo de lugares parecidos; León, Alcoy, Cambre, Tenerife… Llega una nueva generación que recoge con pasión la historia de sus mayores y se vuelca en conseguir un producto premium moderno, de calidad excepcional.”
En el sector Premium, o Ultra Premium como se dice ahora para diferenciarse de ciertos productos industriales advenedizos, España no tiene que envidiar a nadie en cuestión de calidad de la oferta. “Absolutamente nada. Sin embargo, aún queda que muchos clientes descubran que una ginebra de aquí como la 119® London Dry puede ser tan redonda y exclusiva como esas ginebras de importación que se muere por pedir. En seguida vemos valor en lo de fuera y a veces nos cuesta reconocer lo bueno que tenemos en este país, que es mucho. Estos reconocimientos ayudan porque ya no eres tú quien lo dice, te lo están señalando desde fuera: -Oye, ahí tenéis un cañón.”